Alcachofas con gambas

 

Alcachofa, alcachofa... no suena muy bien el nombre, pero qué buena que está, jejejeje. Me encantan.

Es una de las plantas cultivadas más antiguas, se han encontrado dibujos de alcachofas en tumbas egipcias y altares de sacrificio. ¿comerían los egipcios alcachofas?  los griegos y los romanos sí, pero solamente los tallos y en abundancia, porque creían que tenían efectos afrodisíacos y digestivos.

Hace tiempo leí que el nombre alcachofa deriva de un término árabe que significa "lengüetas de la tierra".

A mí me encantan las alcachofas, como sean, mejor cuando son frescas, recién cortadas de la alcachofera silvestre (vaya un nombrecico, parece un insulto), pero descubrí hace tiempo unas bolsitas de alcachofas congeladas que están buenísimas.

Tener una bolsa de alcachofas congeladas es todo un acierto porque en un periquete hacemos un plato riquísimo y rapidísimo.

No me digáis que no os entran ganas de ir rápidamente a la cocina y preparar este plato, de verdad que es muy fácil y si se acompaña de un vino blanco y un mantel bonito será toda una delicia.

 

El vino y el mantel lo dejo a vuestra elección, para el plato los ingredientes son:

• 250 g de alcachofas congeladas
• 150 g de gambas peladas congeladas
• 4 ó 5 ajos tiernos
• 1 pimiento verde italiano
• Perejil
• 1 vaso de vino blanco
• 1 guindilla
• Hierbas provenzales
• Aceite
• Sal

En primer lugar hay que limpiar los ajos tiernos y el pimiento. Partir en trozos pequeños.

En una cazuela poner a calentar dos cucharadas de aceite y echar los ajos y un poco de sal.

 

 

Dar unas vueltas y cuando estén doraditos añadir las gambas,  la guindilla y un poco de hierbas provenzales. Sofreír hasta que las gambas cambien de color, sacar y reservar.

 

 

 

A continuación en el mismo aceite se echan las alcachofas sin descongelar y el pimiento troceado, se remueve y se añade el vino blanco sin que llegue a cubrir del todo.

Dejamos cocer hasta que reduzca el caldo. Las alcachofas se cuecen en poco tiempo, pero si se consume todo el caldo y todavía no están tiernas, añadir poco a poco vino, hay que tener cuidado, no deben quedar caldosas.

Por último y una vez cocidas, se añaden los ajos y las gambas, se remueve con cuidado para que no se rompan y espolvoreamos con perejil picadito.
 

Espero que os guste.